Voy a la huelga porque es la única manera que tengo de expresar mi descontento con este mercado laboral tan tremendamente injusto.
Porque estoy de lado de los trabajadores, de los débiles del sistema a los que obligan a pagar los platos rotos de la crisis
Porque las medidas que está tomando el gobierno para salir de la crisis suponen una vuelta atrás en las conquistas laborales y sociales de los trabajadores
Porque a pesar de que los jóvenes de hoy son los más formados de la historia de España, también son los que sufren la mayor tasa de paro y precariedad laboral.
Porque somos muchos los que teniendo formación universitaria nos tenemos que conformar con trabajos precarios de categoría muy inferior al nivel de estudios, no digamos ya en el caso de las mujeres a las que les es imposible conciliar su vida laboral y familiar.
Porque durante mucho tiempo fui becaria y sé lo que es trabajar sin ningún derecho y con todas las obligaciones
Porque estoy harta de ir a perder el tiempo a la oficina del SAE, que no sirve para nada
Porque serán muchos los mileuristas que dejarán de serlo, ya que sus sueldos se verán mermados
Porque considero que los políticos mienten a los jóvenes cuando los animan a realizar cursillos y talleres de empleo prometiéndoles que así encontrarán trabajos mejor remunerados, cuando ellos saben por propia experiencia que no es así como se consiguen buenos puestos, sino arrimándose al poder.
Por solidaridad con tantísimos parados que el día 29 no tienen la posibilidad de decidir si apoyar o no la huelga porque no tienen ni siquiera un lugar al que no acudir a trabajar
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